Las salamandras son una de las opciones más acogedoras y efectivas para calefaccionar el hogar. Su capacidad para generar calor constante y prolongado las hace muy populares en invierno. Sin embargo, para aprovechar al máximo su rendimiento y evitar humo innecesario, es fundamental encender el fuego correctamente.

En esta guía aprenderás paso a paso cómo encender una salamandra, qué materiales usar, y qué errores evitar para lograr una combustión eficiente y segura.


1. Preparar la salamandra antes de encenderla

Antes de prender el fuego, asegurate de que la salamandra esté lista:

  • Limpieza previa: retirá las cenizas acumuladas y revisá que las entradas de aire estén libres de obstrucciones.

  • Verificá el tiraje: la chimenea o caño debe estar limpio para permitir que el humo salga sin dificultad.

  • Revisá la puerta y sellos: un buen cierre evita que el humo se filtre hacia el interior de la casa.


2. Materiales que vas a necesitar

  • Leña seca (preferentemente dura como quebracho, eucalipto o encina).

  • Leña fina o astillas para iniciar la combustión.

  • Papel o pastillas de encendido (no uses líquidos inflamables).

  • Encendedor o fósforos largos.


3. Paso a paso: Cómo encender el fuego

Paso 1: Abrir entradas de aire

Asegurate de que todas las entradas de aire de la salamandra estén abiertas para favorecer el tiraje inicial.

Paso 2: Colocar el material de encendido

En el centro de la cámara de combustión, coloca una base de papel o pastillas de encendido. Encima, pon astillas o leña fina formando una estructura tipo “tepee” o “torre”.

Paso 3: Añadir leños medianos

Sobre la leña fina, coloca uno o dos leños medianos, dejando espacio entre ellos para que circule el aire.

Paso 4: Encender

Prendé el papel o las pastillas por varios puntos para que el fuego se propague de forma pareja.

Paso 5: Incorporar leños grandes

Cuando las astillas y leños medianos estén bien encendidos, añadí leños más grandes para mantener el calor por horas.


4. Consejos para un encendido más eficiente

  • Usá leña seca: la leña húmeda genera humo, hollín y reduce la eficiencia.

  • No sobrecargues la salamandra: es mejor agregar leña de a poco.

  • Mantén el vidrio limpio: así podrás controlar la llama sin abrir la puerta innecesariamente.

  • Controlá la entrada de aire: una vez que el fuego está estable, podés cerrarla parcialmente para prolongar la combustión.


5. Errores comunes que debes evitar

  • Usar combustibles líquidos como nafta o alcohol (peligroso e innecesario).

  • Encender con leña húmeda o verde.

  • Cerrar la entrada de aire demasiado pronto.

  • No limpiar periódicamente el conducto de humos.


Preguntas frecuentes (FAQ)

¿Cuánto tiempo tarda en calentarse una salamandra?
Entre 20 y 40 minutos, dependiendo del tamaño y tipo de leña.

¿Qué leña calienta más?
Las maderas duras como quebracho, encina o roble generan más calor y duran más encendidas.

¿Puedo usar briquetas?
Sí, siempre que sean de buena calidad y libres de químicos peligrosos.


Beneficios de encender la salamandra correctamente

  • Menor consumo de leña.

  • Mayor duración del calor.

  • Menos humo y hollín.

  • Más seguridad y confort.